PubLihora

PubliKlendario



UWA

Buscalo tú mism@

DOBLE VENGANZA

Luego de salir de la cárcel, tras haber cumplido una condena injusta, Stéfano Fernández juró vengarse de la familia Pardo Figueroa, puesto que gracias al jefe de dicho hogar, lo habían privado de su preciada libertad, lo primero que hizo fue ir a presentarse ante Alfredo Pardo, para restregarle en la cara su libertad, al ingresar en la casa de aquella gente, con la primera persona con la que se encontró fue con Anyalli, una joven de veintidós años de edad, hija del hombre que le desgració la vida, al verla, sintió gran atracción por ella,  en ese instante se le olvidó el porque de su visita, todo el rencor  y odio que sentía dentro de si, se esfumó; la jovencita acostumbrada a tratar mal a quienes consideraba inferiores a ella, lo hecho  de su casa a gritos, debido a que lo creía un tipo sin clase alguna, el quedó perplejo al oír las palabras hirientes que salían de tan hermosa mujer, poco después llegó Ximena , la ultima descendiente de Alfredo, esta agraciada muchachita tenía diecinueve años, era alegre, divertida y un tanto alocada, le gustaban las fiestas, además tenia problemas con las drogas; ya antes había estado a punto de morir, debido a una sobredosis, la adolescente se sintió atraída por aquel desconocido así que mostró amabilidad y le preguntó el por que de su visita, iba a contar toda su verdad, pero contuvo su ira y expresó que venía por el anuncio del periódico: SE NECESITA GUARDAESPALDA; mientras conversaban  gustosamente, apareció el padre de la chica, Stéfano al reconocerlo sintió enormes deseos de estrangularlo y acabar con su vida en el acto, sin embargo con gran esfuerzo, logró contenerse por lo que se quedó con el puesto.
Fernández se convirtió en custodio de Ximena, al principio se le hizo difícil, puesto que ella iba de reave en reave (fiesta electrónica) era incansable, poco a poco este fue acostumbrándose  y empezó a gustarle ese ritmo de vida, sin embargo, no había olvidado el motivo por el que se encontraba ahí. Cierta noche, mientras la última de las Pardo estaba nadando en la alberca, perdió el conocimiento y se ahogó, puesto que estaba con los efectos  de la droga, afortunadamente Stéfano la vio, sin perder tiempo se zambulló en la piscina y la sacó, y le brindo respiración boca a boca; a los pocos segundos reaccionó, la joven expresó su agradecimiento con un impetuoso beso, esto le sirvió para darse cuenta que la adolescente estaba enamorada, así que decidió sacar provecho a lo que ella sentía por él, desde ese momento la empezó a enamorar y hacer insinuaciones lujuriosas hasta que una noche cayó en las garras de aquél mozo ansioso de venganza; cedió ante el placer, fue completamente suya, en cuerpo y alma.
Anyali tras haber tenido un fuerte altercado con su multimillonario prometido, después de haberlo encontrado besando a otra mujer, juró desquitarse y pagarle con la misma moneda, así que citó a Stéfano al mismo café donde acostumbraba ir con su ex, en el momento que este llegó, ella besó a Fernández; Brayan muerto de celos, pidió una explicación, pero no se la dieron, por el contrario, se retiraron del lugar dejándolo con la palabra en la boca; la mujer le dio las gracias y posteriormente le explicó la causa de su pena, el efebo ofreció ayudarla en su venganza, además le confesó que la amaba con pasión abrazadora, estas palabras atravesaron el duro corazón de la primogénita y la conmovieron. Desde ese día  aquel joven se convirtió en amante de las hermanas Pardo Figueroa.
Un mes después Ximena y Anyalli, cada una por su propio lado, le anunciaron que se convertiría en padre; ese fue el día más feliz para ese hombre, pero no por la noticia que había recibido, sino por ver consumada su  venganza. A la hora del almuerzo, cuando la familia se hallaba reunida en el comedor, se presentó y reveló su verdadera identidad, también hizo saber a las hermanas que solo las había utilizado para llevar a cabo su cometido; enterado de lo sucedido, Alfredo fue en busca de su arma y de un tiro certero acabó con la vida de aquel pobre vengador.
Yesenia Olano Villegas

viernes, 29 de octubre de 2010

DOBLE VENGANZA

Luego de salir de la cárcel, tras haber cumplido una condena injusta, Stéfano Fernández juró vengarse de la familia Pardo Figueroa, puesto que gracias al jefe de dicho hogar, lo habían privado de su preciada libertad, lo primero que hizo fue ir a presentarse ante Alfredo Pardo, para restregarle en la cara su libertad, al ingresar en la casa de aquella gente, con la primera persona con la que se encontró fue con Anyalli, una joven de veintidós años de edad, hija del hombre que le desgració la vida, al verla, sintió gran atracción por ella,  en ese instante se le olvidó el porque de su visita, todo el rencor  y odio que sentía dentro de si, se esfumó; la jovencita acostumbrada a tratar mal a quienes consideraba inferiores a ella, lo hecho  de su casa a gritos, debido a que lo creía un tipo sin clase alguna, el quedó perplejo al oír las palabras hirientes que salían de tan hermosa mujer, poco después llegó Ximena , la ultima descendiente de Alfredo, esta agraciada muchachita tenía diecinueve años, era alegre, divertida y un tanto alocada, le gustaban las fiestas, además tenia problemas con las drogas; ya antes había estado a punto de morir, debido a una sobredosis, la adolescente se sintió atraída por aquel desconocido así que mostró amabilidad y le preguntó el por que de su visita, iba a contar toda su verdad, pero contuvo su ira y expresó que venía por el anuncio del periódico: SE NECESITA GUARDAESPALDA; mientras conversaban  gustosamente, apareció el padre de la chica, Stéfano al reconocerlo sintió enormes deseos de estrangularlo y acabar con su vida en el acto, sin embargo con gran esfuerzo, logró contenerse por lo que se quedó con el puesto.
Fernández se convirtió en custodio de Ximena, al principio se le hizo difícil, puesto que ella iba de reave en reave (fiesta electrónica) era incansable, poco a poco este fue acostumbrándose  y empezó a gustarle ese ritmo de vida, sin embargo, no había olvidado el motivo por el que se encontraba ahí. Cierta noche, mientras la última de las Pardo estaba nadando en la alberca, perdió el conocimiento y se ahogó, puesto que estaba con los efectos  de la droga, afortunadamente Stéfano la vio, sin perder tiempo se zambulló en la piscina y la sacó, y le brindo respiración boca a boca; a los pocos segundos reaccionó, la joven expresó su agradecimiento con un impetuoso beso, esto le sirvió para darse cuenta que la adolescente estaba enamorada, así que decidió sacar provecho a lo que ella sentía por él, desde ese momento la empezó a enamorar y hacer insinuaciones lujuriosas hasta que una noche cayó en las garras de aquél mozo ansioso de venganza; cedió ante el placer, fue completamente suya, en cuerpo y alma.
Anyali tras haber tenido un fuerte altercado con su multimillonario prometido, después de haberlo encontrado besando a otra mujer, juró desquitarse y pagarle con la misma moneda, así que citó a Stéfano al mismo café donde acostumbraba ir con su ex, en el momento que este llegó, ella besó a Fernández; Brayan muerto de celos, pidió una explicación, pero no se la dieron, por el contrario, se retiraron del lugar dejándolo con la palabra en la boca; la mujer le dio las gracias y posteriormente le explicó la causa de su pena, el efebo ofreció ayudarla en su venganza, además le confesó que la amaba con pasión abrazadora, estas palabras atravesaron el duro corazón de la primogénita y la conmovieron. Desde ese día  aquel joven se convirtió en amante de las hermanas Pardo Figueroa.
Un mes después Ximena y Anyalli, cada una por su propio lado, le anunciaron que se convertiría en padre; ese fue el día más feliz para ese hombre, pero no por la noticia que había recibido, sino por ver consumada su  venganza. A la hora del almuerzo, cuando la familia se hallaba reunida en el comedor, se presentó y reveló su verdadera identidad, también hizo saber a las hermanas que solo las había utilizado para llevar a cabo su cometido; enterado de lo sucedido, Alfredo fue en busca de su arma y de un tiro certero acabó con la vida de aquel pobre vengador.
Yesenia Olano Villegas

No hay comentarios:

Publicar un comentario